sábado, 23 de febrero de 2008

Me gusta como piensas, me gusta como eres y lo que eres, me gusta tu manera de hablar, de mirarme, de sonreir, me gustas como eres en realidad y no me interesa tu mascara...

jueves, 21 de febrero de 2008

Dark angel

Esta es la primera pagina de el libro que estoi escriviendo, si os gusta esperaos asta k se termine. JEJEJE que mala soy XD.
Venganza entre la oscuridad Entre las muchas sombras que cubrían el cielo, se podía distinguir una mujer, con dos enorme alas negras, y con una lanza un poco mas alta que ella misma. La muerte se reflejaba en sus vidriosos ojos verdes. Miles de cadáveres se desvanecían en la nada, como si nunca hubieran estado allí. Entre los cuerpos también se distinguían otros cuerpos de personas pálidas, con grandes alas negras entre fuego y oscuridad ,sumida en muerte. Detrás de la muchacha de ojos verdes havia un hombre con los ojos negros, alto y vestido de negro. El también estaba herido y miraba a la chica con malicia la chica le devolvió la mirada con rabia. -¿Cuanto tiempo verdad Ebrith?-La mujer ni se inmuto. -¿Preparado? -¡Mas que listo! La joven de alas negras llamada Ebrith y el hombre de ojos negros se pusieron a luchar aunque estaban mal heridos los dos. -No peleas nada mal comparada con los de tu raza impura. -Te matare, ¡acabare con tigo como tú acabaste con mi gente! -Inténtalo si te crees capaz La muchacha dijo unas palabras en un idioma extraño y de su lanza salió un rayo que iba directo hacia el cuerpo del hombre, pero por desgracia se aparto, aunque le rozo el brazo. Solo le rozo el brazo pero el sentía un dolor insoportable, apenas pudo contener las lagrimas del dolor. La muchacha sonrió. -Estas perdiendo agilidad -¡Cállate! Este dolor que siento no se puede ni comparar con el que vas a sentir tú ahora. El hombre alzo las manos y de ellas salio una bola de fuego que le provoco graves quemaduras a Ebrith. La joven desplomada en el suelo no se podía ni mover del dolor que le producían las quemaduras. -La ultima, La última de una raza impura. Por fin muere. El hombre se fue, dejando que la joven se fuese desvaneciendo poco a poco como los otros cuerpos que se hallaban en ese lugar. Un hombre delgado, alto y moreno se acerco corriendo con lágrimas en los ojos. -¡Ebrith! No te me mueras, piensa que aun tienes que vengar a tu gente. Boy a llevarte a casa, tengo que curarte esas heridas.